Fenomenología
Artículo revisado y actualizado: 2 de julio del 2024.
Dr. Enrique A. León Maristany
Para comprender los procesos de investigación en el arte, es preciso disponer de fundamentos teóricos que nos ayuden a comprender el proceso creativo y contribuyan a nuestro proceso de investigación estética.
Se ha diseñado el curso con el propósito de adquirir estos marcos teóricos que permitirán al investigador realizar su recopilación de información e interpretación de ella. A través de un enfoque cualitativo, se analizan los datos y los clasifican en categorías, las cuales tienen el mismo criterio que la paradigmática semiótica en la lectura de la imagen.
Es crucial tener en cuenta los fenómenos estéticos como parte de la introducción al conocimiento del arte.
Los acontecimientos evocan el arte y su universo. El artista, el museo, la crítica, las obras, etc., que influyen en la percepción general del público, críticos, museólogos, artistas y otras personas involucradas directa o indirectamente con este universo tan complejo como polémico.
Conceptos
Para iniciar, es imperativo adquirir conocimiento acerca de los aspectos teóricos del arte, tales como la filosofía y la psicología, y así profundizar en los fenómenos estéticos.
Existen numerosos autores que han escrito sobre el tema en la filosofía, desde Aristóteles hasta la actualidad; nos centraremos en una definición actualizada para no ahondar en conceptos sobre filosofía que no son el propósito de este curso.
Fenómeno
Fenómeno: del griego: φαινόμενoν: 'apariencia, manifestación.
Según el diccionario de la RAE:
1. m. Toda manifestación que se hace presente a la consciencia de un sujeto y aparece como objeto de su percepción (http://dle.rae.es febrero 2016).
Según Lalande “Lo que aparece a la conciencia, lo que es percibido tanto en el orden físico como psíquico” (Lalande, 1953, pág. 466).
Podemos analizar también muchos conceptos que parten de la fenomenología de Husserl, Heidegger, etc.
En resumen, es factible considerar como fenómenos físicos a todos los objetos naturales, artificiales y virtuales que surgen ante nuestros sentidos, tales como el gusto, el tacto, el olfato, el oído y la vista.
Existen otros tipos de fenómenos, pero nos enfocaremos en este con el objetivo de explicar lo que nos resulta más interesante en este momento.
Experiencia
Según la RAE “1. f. Hecho de haber sentido, conocido o presenciado alguien algo”. (http://dle.rae.es/ febrero 2016).
Cuando percibimos un fenómeno y lo imprimimos en la mente, experimentamos una sensación. A este proceso se denomina experiencia.
Fenómeno Estético
Aldrich, en su ensayo Filosofía del Arte, nos brinda la oportunidad de comprender la idea de fenómenos del arte. “Los fenómenos del arte: Un fenómeno, en términos populares, es algo que mueve a la gente a pensar acerca del mismo. En este sentido, hay fenómenos del arte. Podría llamarlos los datos del arte, pero esta expresión no caracteriza lo que generan las preguntas. Sin embargo, tanto los fenómenos como los datos se dan. Son los puntos de partida. La diferencia es que un fenómeno es un dato rodeado de cierta penumbra de preguntas.” (1966, pág. 1).
También se hace la siguiente pregunta: ¿Qué son, entonces, los fenómenos del arte? Una pregunta a la que daremos respuestas.
Referimos, según Lalande (1953), que la percepción se da tanto en el orden físico como psíquico. Analizando esta afirmación, entendemos que en el arte existen diferencias, ya que el artista planifica una obra para afectar sensiblemente a su espectador. Durante la contemplación de una obra artística, se pueden alterar las emociones, no solo lo racional, sino también sensiblemente los sentimientos del público o espectador, tal como explican los filósofos y psicólogos en diversos tratados. No vamos a enfocar nuestra intención en resumir estos conceptos que pueden ser ampliados por el lector.
En resumen, al contemplar una obra de arte, ya que presenta elementos materiales y elementos estéticos, podemos definir que nos encontramos ante un fenómeno estético. Es importante tener en cuenta que, cuando se usa la palabra estética como adjetivo, se especifica que la palabra que le antecede se refiere únicamente al arte, tanto en el objeto artístico como al proceso creativo.
Como se explica en el libro Sensación y Percepción (Matlin & Foley, 1996) podemos percibir de diversa forma o de la misma manera, tanto física como psíquicamente.
La siguiente explicación de los fenómenos fue tomada de la Tesis Doctoral del autor (León Maristany, 2013, págs. 28-32)
Lukács, en su ensayo “Estética”, aporta un fondo teórico amplio acerca de la estética como disciplina filosófica. En su libro “Filosofía del Arte”, Virgil C. Aldrich desarrolla los fenómenos del arte y la perspectiva estética, fundamentos importantes para esta investigación que connota el pensamiento filosófico contemporáneo. Además, aborda la obra de arte como fenómeno de estudio y hace referencia a una taxonomía del arte. Estas concepciones contribuyen al fundamento de la investigación artística. Dado que las teorías del arte se originan en el pensamiento, se fundamentan en la filosofía del arte para explicar el fenómeno artístico. Por consiguiente, el arte y la filosofía conviven en una simbiosis de conocimiento que describe, interpreta y analiza el fenómeno artístico.
De acuerdo con Aldrich, con el fin de exponer los fenómenos en el arte, también conocidos como fenómenos estéticos, vamos a determinar los principales fenómenos: en primer lugar, según Aldrich: “Un fenómeno es algo que mueve a la gente a pensar acerca de él mismo. En este sentido, hay fenómenos del arte” (Aldrich, 1966, p.1).
Fenómenos en el arte y el proceso creativo
El fenómeno del reflejo
“La imagen de un espejo no está incorporada a un medio; al contrario, parece curiosamente desincorporada, muy distinto lo que ocurre con una imagen en términos de arte. Ahora bien, si usted insiste en que el espejo es el medio, entonces deberá observar que la imagen no está relacionada con el vidrio y demás materiales de lo que está hecho el espejo, como la imagen de la montaña en, digamos, el “Mointe Sainte-Victoire”, de Cézanne, que está relacionado con el lienzo pigmentado. Esto hace que la imagen del espejo sea un fenómeno inquietante, por propio derecho, y que incite el interés del epistemólogo, mientras que la obra de arte, opaca, surge a la vida bajo las manipulaciones del artista, llega a ser un fenómeno para el filósofo del arte.” (Aldrich, p. 1 y 2).
En este fenómeno, el espejo carece de un medio específico (color, forma), si no que se encuentra únicamente el reflejo de lo que se observa. Por consiguiente, la imagen reflejada en un espejo no es una obra artística, sino un “fenómeno inquietante”, tal y como sostiene Aldrich.
El fenómeno del espacio-fantasma
“… Pienso en un momento en propiedades como lo plano, desde cierto punto de vista, pero “en la pintura” vemos una manzana bien sólida.
Estas consideraciones presentan un fenómeno fantasma que frecuenta todas las filosofías del arte.” (Aldrich, 1966, Pág. 2).
Este fenómeno se refiere a que en la pintura, la estética emplea la perspectiva, el color, la composición y la composición, con el fin de impresionar en los sentidos del espectador como un volumen y espacio en la obra de arte, que se encuentran en un espacio plano (largo y ancho), pero el espectador puede observar una figura voluminosa, generando un fenómeno de espacio que no existe (fenómeno fantasma).
Fenómeno de la semejanza
“Luego encontramos el fenómeno del modo curioso cómo una obra de arte se parece a algo. Este notable tipo de semejanza puede apreciarse y confirmarse al mirar una obra de arte, y luego considerar lo que representa en términos comparativos”. (Aldrich, 1966, Pág. 2).
Aldrich nos indica que, en el arte figurativo, los signos, también llamados elementos o figuras que se representan, se identifican con la conexión que tienen con algo en el mundo. La semejanza es el vínculo entre lo que vemos en la obra de arte y lo que identificamos en el mundo.
Fenómeno de la representación
“Y con esto se presenta otro fenómeno, o sea, cómo debe distinguirse la representación, en el arte, de la expresión (su expresividad), y cómo están relacionadas. Parece frecuentemente como si lo importante solo fuera la expresividad, bajo consideraciones estrictamente estéticas.” (Ibídem Pág. 3)
El fenómeno de la representación está referido a la semejanza que existe entre el objeto y la realidad. Un retrato representa a la persona, no es la persona. La semejanza con la realidad crea la representación. En la Gioconda de Leonardo, la mujer fue una realidad; lo que vemos es la representación de lo que fue. Para esto recurrimos al fenómeno de la semejanza. La semejanza en el retrato es la representación de la persona. Así mismo sucede con todos los objetos representados en la obra de arte figurativa.
El mismo concepto nos lo refiere el libro Estética: Historia y fundamentos: “Las artes visuales pueden decirse que representan objetos del mundo. Rigurosamente hablando, la pintura presenta una serie de colores y figuras que luego interpretamos o elaboramos como representaciones de diversos objetos del entorno vital.” (Bearsdsley & Hospers, 2007, pág. 120).
Fenómeno de la expresión
Al oír la expresión artística, se comprende que la palabra expresión se refiere a comunicar pensamientos, pero también afectos y emociones, tanto verbal como no verbal, mediante los gestos y movimientos del cuerpo. La palabra artística, como adjetivo del término expresión, se limita a la creación y producción artística, donde el o la artista expresan sus pensamientos y sentimientos a través del arte…
Fenómeno del simbolismo
Una forma de comprender el simbolismo es cuando carecemos de la imagen o el relato exacto de lo que debemos representar, por lo que tomamos el perfil de una persona u objeto y le otorgamos otro significado. Por ejemplo: no disponemos de la imagen ni el relato de cómo fue Jesús de manera precisa, entonces tomamos un “modelo” y lo representamos, pero le damos otro significado al de “modelo” y ese nuevo significado es “Jesús”.
En ambos cuadros vemos diferentes escenarios en tiempo y lugar en ambos cuadros, así como las personas representadas son diferentes, pero la interpretación de su significado es la misma. Se trata de diversos cuadros con el mismo valor simbólico.
Fenómeno de la forma
La similitud en la representación radica en las formas de los signos en la obra artística. Las técnicas permiten lograr el fenómeno de la semejanza y el de la representación, de modo que se generan una cadena de fenómenos en el proceso creativo.
A continuación comprenderemos que las formas se encuentran entre la delimitación de un espacio en la plástica pictórica y la delimitación de un volumen en la plástica escultórica. Este espacio contorneado en la pintura contiene color y nos produce una sensación de semejanza. También nos propone una forma de establecer la existencia de algún material. Lo que a su vez muestra una semejanza, esto también es la forma. Las otras explicaciones acerca de la filosofía son solo críticas; Aldrich nos indica: “Y el medio, y tema central de una obra de arte, parecen confundirse con la manera y contenido de la misma, haciendo que se baste sola.” (Aldrich, 1966, p. 3).
Fenómeno de la percepción estética
Este fenómeno es el tercer momento en el proceso creativo, cuando el espectador se encuentra en estado de contemplación ante la obra de arte, y dentro de este fenómeno hay una cadena de otros fenómenos que se producen hasta la creación del conocimiento a través de la obra de arte.
Los diagramas siguientes evidencian de manera clara las diferencias entre la percepción del mundo objetivo y la percepción del mundo subjetivo de la estética en el arte.
Fenómeno del artista
“Relacionada con este fenómeno, se halla la paradoja de la relación ambigua del artista con la vida cotidiana y sus valores.
Por una parte, el artista parece estar alejado de la vida, preso en la autosuficiencia de sus obras de arte, y no sabiendo cómo vivir, en la realidad; por otra, parece intimar más con la vida misma que los que no son artistas, de tal manera que puede revelar sus secretos. (Existe un antiguo adagio: pudo salvar a los demás, pero no pudo salvarse a sí mismo). Esta relación de distancia y cercanía del artista con el mundo da como resultado verdad fenomenal. Y parece ser esta intrigante clase de relación con sus obras de arte la que otros deben penetrar, si se proponen experimentarlas en lo que valen, precisamente como arte.” (Virgil Aldrich, 1966, p. 4).
Aldrich mismo resalta la complejidad del artista en su existencia en el mundo y el arte. El artista es una entidad intrínseca en el proceso creativo, donde se produce el primer momento de la creación, donde se produce una cadena de circunstancias, procesos, vivencias, entre otras, hasta la creación de la obra artística.
Se trata de un fenómeno en el ámbito artístico debido a que, al interrogarse acerca de su persona, ¿cuál es su identidad y qué buscas en este lugar? Y aquel hombre, que no posee nada especial en el cuerpo, pero cuando desata su genialidad, cuando se manifiesta su alma y su espíritu, solo te queda contemplar. Como Dios pudo crear un ser especial, distinto, genial… A continuación, te percatas de que Dios diseñó un artista…
Se trata de un fenómeno en el arte debido a que no se otorga una moneda a quien observas, lo ves y piensas que no posee valor, lo ignoras, lo rechazas ni lo saludas, ya que lo maravilloso de la vida no se encuentra en percibir con la mente, sino en sentir con el alma, y ese sentimiento se origina de la misma.
Es un fenómeno en el arte porque esperamos ver una abrigo de piel, un peinado de reina, aretes de oro y collar de perlas, una belleza construida por un cirujano, descendiendo de un carro que destella por su brillo, y creemos que tenemos al frente a alguien brillante; sin embargo, la presencia de aquel que no tiene nada que lo haga resplandecer por fuera, y desata su talento, el alma brilla y resplandece en tus emociones, te deja soñando, disfrutando, anonadado por la belleza de lo que puede hacer con su alma un ARTISTA…
Es un fenómeno en el arte porque cuando alguien no se rinde, no abandona la pelea, no le importa que el mundo no lo comprenda, y persigue sus sueños hasta morir, entonces tienes un genio, que no importa la edad que tenga, solo dejará de vivir su sueño el día que muera, porque ama lo que hace y sabe que solo amando lo que se hace podrá hacer realidad sus sueños, el amor solo lo viven los que saben soñar, y sabrás cuando te encuentres con alguien así que conociste a este ser creado por la magnificencia de Dios, al que el mundo conoce como ARTISTA…
Es un fenómeno en el arte porque el mundo vive dividido, los políticos se ufanan que pueden solucionarlo, y ninguno puede llegar a llenar el corazón del que no tiene amor, que se siente solo, que en su dolor se rinde al mundo… entonces el genio de quienes no son comprendidos, cambia un pedacito de aquel mundo unos instantes, y llena aquel corazón que necesita de aquellos que el mundo llama ARTISTAS…
Se trata de un fenómeno en el arte debido a que cuando un artista pinta un mundo de sueños, al apreciar la obra de arte, haces tuyos sus sueños. Sintiendo el poder de la imaginación y creatividad, reflexionando sobre lo que hizo el artista, comprenderás que siempre fue atrapada tu mente y tus emociones por la obra de un artista. Música, poesía, pintura… También comprenderás que no hay salida, siempre serás atrapado por sus obras, no puede negarlo, es fantástico ser envuelto por el arte. Esto se produce debido a que el arte tiene un origen divino. La divinidad creó a los artistas debido a su conocimiento de que el ser humano no desea una existencia desfavorable; por lo tanto, vivificará su existencia con el arte, que se originó en la inspiración y mente de los artistas.
Fenómeno de la universalidad
“Se dice que una buena obra de arte es de significación universal, y, sin embargo, resulta casi única, en cuanto a que parece ser la ocasión de tantas apreciaciones en individuales distintas como individuos haya. En pocas palabras: aunque esto no se exprese en el lenguaje de la generalización, lo que significa parecer ser universalmente verdadero. Este sentido de lo “verdadero” es tan fenomenal como cualquier otra cosa.” (Ibídem, p. 6).
Fenómeno del ilusionismo
El ilusionismo se origina debido a una distorsión en la percepción.
El platón lo dijo.:
- Asocia las ilusiones del arte como el engaño intencional, y por esto las encuentra perniciosas en cuanto a lo moral y lo metafísico.
- Un artista hábil es una amenaza, porque induce a falsas creencias acerca de la realidad y despierta en la gente emociones subversivas de la razón.
Gombrich
- Lo hace sutil es que destaca la fuerza maravillosa, de tipo constructivo, de la percepción imaginativa, sobre su objeto.
Tolstoi
- Que lo considera un proveedor de emociones, tendente a una comunidad de sentimientos.
Diccionario de la Real Lengua Española
- Arte de producir fenómenos que parecen contradecir los hechos naturales.
Subjetivismo e ilusión
El subjetivismo, en la filosofía artística, emplea de manera significativa la idea de ilusión. El subjetivismo y el ilusionismo presentan un vínculo íntimo.
Categorización
Ilusionismo intencionado
Trampantojo
Ilusionismo Abstracto
Ilusionismo Indeterminado
LO INDETERMINADO
Ilusionismo Místico.
El ilusionismo místico se refiere a imágenes aisladas que la naturaleza produce, como las nubes, las ramas, los troncos de los árboles, las manchas en las rocas y paredes u otro objeto, que se asemejan a una imagen divina, asociada al animismo para la representación de una figura santa.
Un hecho descrito como religioso, fantástico y casi inverosímil sucedió el domingo en una vivienda del barrio Abbas Turbay de Florencia, departamento de Caquetá, Colombia, donde una ama de casa descubrió que en el patio de su hogar se apareció la Virgen María…
" http://forosdelavirgen.org/76906/imagen-de-la-virgen-maria-aparece-en-colombia-14-03-27/
Ilusionismo y animismo
«No te hagas ningún ídolo ni figura de lo que hay arriba en el cielo, ni de lo que hay abajo en la tierra, ni de lo que hay en el mar debajo de la tierra. No te inclines ante ellos ni les rindas culto, porque yo soy el Señor, tu Dios, Dios celoso, que castiga la maldad de los padres que me odian, en sus hijos, nietos y bisnietos; pero que trato con amor por mil generaciones a los que me aman y cumplen mis mandamientos».
«No te hagas ningún ídolo ni figura […] No te inclines ante ellos, ni les rindas culto»
Por algo Dios no dejó una imagen suya, ni de su hijo… para que se cumpla la ley de no hacer imágenes para rendir culto.
Catarsis en el espectador
El proceso creativo en el arte finaliza con la contemplación del espectador. El proceso creativo sin la presencia del público no completa por sí solo el proceso creativo. La obra tiene un mensaje y una expresión, solo pueden llamarse así (mensaje y expresión) cuando llega al público o espectador.
El espectador experimentará una experiencia estética mediante la contemplación de una obra artística, donde sus sentidos podrán percibirla; posteriormente, se generará una sensación en su mente y se asimilará por el intelecto y las emociones que son afectadas por el objeto estético. El intelecto nos proporcionará, en un juicio y concepto semiótico, explicado por la psicología como fenómeno eidético “E.R. Jaensch”, lo que debe ser seguido de la lectura de los códigos o signos (reconocimiento por semejanza), y en un juicio reflexivo (estético), la categoría que, de acuerdo a su preferencia, puede ser bella, fea, sublime, trágica, entre otras. (ver categorías estéticas).
Lo sublime como categoría está relacionada con la grandiosidad de un fenómeno en el arte, tomando la conclusión sobre esta categoría en la tesis doctoral que se refiere a: “En conclusión, es factible afirmar que lo sublime como categoría estética es una experiencia en la que el espectador experimenta una sensación de satisfacción y una combinación de sentimientos de goce, placer, horror, entre otros, que, en función de su gusto, juzgue como sublime.”
Las categorías estéticas pueden elevarse a lo sublime en función de la profundidad de la emoción que causen en su espectador. El arte es más afectivo que cognitivo, y cuando deseamos transmitir un mensaje de belleza o terror, este se eleva en un nivel estético tan alto que no solo lo afecte emocionalmente, sino que llegue a lo más profundo de sus emociones, la persona llega a conmocionar; este fenómeno lo explica Philipp Lersch, quien nos describe las emociones y nos explica que estas tienen un nivel de profundidad; lo más profundo lo denomina como fondo endotímico. Una vez que la emoción que emana de la obra artística llega a este punto, es factible asumir que penetran en nuestro estado consciente, superando lo racional. De esta forma surge la conmoción que se produce por la obra estética.
El Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española establece la catarsis; su tercera definición se aproxima a la idea de catarsis en el arte.
3. f. Purificación, liberación o transformación interior suscitadas por una experiencia vital profunda.
La liberación o transformación pueden proporcionar una idea del resultado de este fenómeno que ocurre en lo más íntimo de la persona, que libera una fuerte carga emotiva y transforma su estado anímico debido a la abundancia de emociones que invaden su mente, y desequilibra su relación racional y afectiva. La afectividad se sobrepone al intelecto y esto es una forma de desequilibrio que conduce a la conmoción emocional.
La RAE define la conmoción de la siguiente manera: “1. f. Movimiento o perturbación violenta del ánimo o del cuerpo.” Como se indica, se produce un estado de perturbación mental, lo cual obstaculiza la claridad en el razonamiento del espectador.
La conmoción provoca muy diversas reacciones en el espectador: llanto, risa, cólera, ira, enmudecimiento, etc.
En el ámbito artístico, la obra de Lady Jane Grey suscitó una gran conmoción en el público.
Catarsis en el Artista
Fenómeno de la genialidad infantil
Fenómeno de la trascendencia en el arte
La capacidad de un artista de excelencia radica en la creación de obras artísticas que deslumbren a la humanidad; sin embargo, existe un valor más elevado que se herede a la eternidad. Este valor siempre es de naturaleza espiritual. No obstante, el Señor se distingue por haberte hecho un individuo singular. Sin embargo, no eres el único, y si posees un brillo particular, debes compartirlo, delegarlo y heredarlo en el momento en que no esté presente. Se entiende de cómo trascender.
Trascender en la filosofía de Kant es: 6. intr. Fil. En el sistema kantiano, traspasar los límites de la experiencia posible. (RAE).
Tu creación más grande artística es tu límite. Para superar ese límite debes trascender, y solo puede ser posible si lo haces en tu prójimo. No le digas solo a un niño o a un joven cómo debe comportarse o cómo debe hacer las cosas, tienes que demostrárselo. Si no son palabras vanas, al aire, porque él va a imitarte, así que no sea tu hijo. Te toca la responsabilidad moral y espiritual de ser ejemplo. Como artista, te corresponde en una palabra “enseñar”, enseñar con el ejemplo y la inteligencia para que te comprendan. Si ya has deslumbrado al mundo, ahora te toca trascender, y a mi modo de ver es formando a su divino tesoro, dando todo lo que sabes sin límites. La finalidad de este acto consiste en trascender con amor, con el fin de que, después de haber deslumbrado al mundo, puedas experimentar la presencia de la divinidad.
“El aprendizaje perfecto es cuando el niño imita a la perfección lo que eres.” En aquel momento, el ser se cuestiona: ¿quién soy?, con el propósito de descubrir el sendero que has seguido y que será seguido inexorablemente. Imita a Dios, para trazar un camino en el que puedan trascender los que te siguen.
Fenómeno Histórico Social en el arte
El ser humano, al nacer, es primordial que se adecue al lenguaje de su entorno; el aprendizaje por imitación prevalece en el infante. En las zonas andinas, el quechua o el aymara forman el lenguaje vernácula de los niños; al enfrentar su crecimiento, llegan a la edad escolar con niños de su misma generación. El castellano aparece en sus vidas, apropiándose de la misma manera de la lengua castellana.
La cultura es el proceso que se aprende de generación en generación. Las generaciones generan historia, pero en una convivencia social; aquí se involucran la sociología y la historia.El artista no es ajeno a este fenómeno. Ernst Kris y Otto Kurz en su libro La leyenda del artista nos mencionan: “El «enigma del artista», el misterio que lo rodea y la magia que de él emana pueden enfocarse desde dos puntos de vista. Se puede estudiar la naturaleza del hombre capaz de crear obras de arte del tipo de las que admiramos —perspectiva psicológica—, o puede uno cuestionarse cómo un hombre tal, a cuyas obras se le da un valor especial, es considerado por sus propios contemporáneos —perspectiva sociológica—.
Ambos puntos de vista están vinculados con las investigaciones históricas. En efecto, ni las diversas habilidades y aptitudes que constituyen el fundamento del “talento” y del impulso a la creatividad artística, ni el papel que el artista desempeña en una sociedad cualquiera se derivan de una serie de circunstancias fijas, sino que, además, están sometidos a diversas modificaciones que solo se pueden comprender a partir de la situación histórica”. (Kriz & Kurz, 1995, pág. 21).
Es evidente que el artista en su proceso creativo involucra diversos acontecimientos del arte en su conexión con su comunidad inmediata, específicamente su familia, y además la sociedad que lo rodea. La convivencia influye en la vida del artista y en la interacción social. Así se inspira. De ahí, su genio creador recopila de la rutina sociocultural que lo absorbe, muchos elementos que contribuirán a la creación de la obra de arte.
Alphons Silberman en la introducción: Situación y vocación de la sociología del arte del libro Sociología del Arte que nos refiere: “Para reconstruir la imagen completa, es decir, considerar igualmente las contribuciones del artista al orden social, la sociología del arte se dedica luego al conocimiento sociológico de la obra de arte”. “Al hacerlo, como ya lo señalamos, de ninguna manera intenta analizar la obra misma, sino que concentra toda su atención en la acción socio-artística. El sociólogo del arte no se propone, pues, analizar la pintura, la música o la literatura como tales, pues juzga inútil toda tentativa tendiente a tratar como un hecho tangible el llamado contenido racional de la pintura o literatura”. (1971, págs. 33-34).
Estas afirmaciones nos permiten poner de manifiesto la idea de que la obra de arte y, en general, el arte en general, están involucrados en un proceso histórico y sociológico, lo cual se traduce en una situación fenomenal. Por esta razón, este fenómeno en el arte se analiza para comprender la obra y su creador.
Fenómeno del Arte y la comunicación
El artista es un comunicador social por excelencia del mundo. A medida que exista la obra de arte, el mensaje se mantendrá transmitido a la sociedad. La comunicación visual se refiere a la comunicación visual como la forma de transmitir el mensaje en la obra de arte para ser interpretado de forma visual por el público o espectador.
En consecuencia, un paisaje, un retrato y una pintura de género poseen un mensaje codificado que se descifra por el espectador al momento de contemplar la estética. La obra de arte se comunica de manera intensa. Esta intensidad genera una sensación en el espectador, quien mantiene la comunicación con la obra e interactúa con ella. La presente situación produce un impacto cognitivo no solo en su capacidad cognitiva, sino también en su afectividad. El mensaje que transmite la obra de arte no puede ser más intenso, vivencial y significativo para el espectador.
En la narrativa de los artistas Ernst Kris y Otto Kurz, se relata: “El secreto del artista es su propio arte, y las palabras que emplea Balzac revelan la idea de que la obra de arte se admira por su poder de comunicar una sensación de vida —podríamos decir, por su vitalidad mágica.” (1979, pág. 107).
La idea de mensaje y vitalidad constituye un valor fundamental en el arte. El mensaje y el valor se determinarán en función de cuán claro sea este para el espectador; la valoración la proporcionarán ellos.
De igual manera, Roger Clausse en su capítulo El gran público frente a la comunicación de masas del libro Sociología del Arte, nos indica:
Fenómeno del Arte y la ideología
Muchos fueron los escritores, especialmente en la época del comunismo en Europa y Asia, quienes pretendieron ideológicamente decir lo que el artista debía realizar. Desde Kant hasta Hegel se esforzó por establecer una asociación entre el arte y la belleza, y de esta forma, los artistas deberían realizar obras hermosas. Se nos habla de una estética marxista, y tratan de ideologizar la estética en las concepciones políticas de gobierno, una lucha entre formalistas que sostenían que el arte debe representar a la naturaleza y informalistas que defendían los movimientos de vanguardia y el arte abstracto.
Los filósofos se equivocaron, ya que el arte no lo determinan las filosofías, lo que determina los ismos o cambios en el arte son los mismos artistas. A los filósofos solo les queda estudiar y describir la realidad estética en el arte.El artista posee su propia ideología, su propia manera de pensar, y esta puede o no coincidir con la sociedad, puede responder a las demandas sociales de ideólogos como no. La obra artística es altamente ideológica, ya que se deriva de una persona que posee sus propias creencias y formas de concebir el mundo. A él le pertenece la idea, la obra siempre será del artista y de su manera de pensar. Eso es ideología en el arte.
En el capítulo La interacción realidad-obra de arte-sociedad del libro Sociología del arte, Vladímir Karbusicky nos asevera::
Fenómeno del Arte y la política
La política siempre ha afectado al arte y al artista. La política no es el resultado del conocimiento artístico, sino de los intereses de los políticos.
Durante la edad media, el Renacimiento, y hasta el siglo XVII La religión en Europa tuvo poder político, este poder fue utilizado y dominó el escenario político a través de la dominación de las artes que contenían una connotación religiosa, esto fue posible por la influencia y dominación de la religión sobre el poder de la política.
No podemos negar que el pensamiento filosófico también estuvo al servicio de la política.
Marx escribe una teoría económica y Lenin se encarga de la política. La Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas surgió con una teoría económica y un planteamiento político; ambos se sustentaron en modelos de pensamiento filosóficos. Ante el surgimiento del arte moderno nació la filosofía marxista, que tuvo entre sus exponentes a Lukács, quién describe la relación del marxismo con la filosofía en la pág. 51 de su libro Estética – 1 cuestiones preliminares de principio cita a Cassierer, sobre los rasgos del pensamiento idealista que refiere:
… “ese materialismo domina en una época que no conoce aún la contraposición antinómica entre idealismo y el materialismo. Esta contraposición se desarrolla en la lucha contra el idealismo filosófico, que es de origen anterior al materialismo filosófico. El materialismo espontáneo de la vida cotidiana conserva, ciertamente, algunos restos de situaciones primitivas, pero obra en un ambiente que ya conoce aquella diferenciación.”
Estamos ante un fenómeno histórico social de lo que él titula los problemas de reflejo en la vida cotidiana, un punto de partida en el que la vida cotidiana sostiene un fenómeno puramente humano. Finalmente concluye diciendo:
“El reflejo de lo estético es sin duda también una prefiguración de la misma realidad objetiva, pero es una verdad humana para los hombres, y, por tanto, el problema En-sí se manifiesta en el hecho y el Para-nosotros tiene que tomar una nueva fisonomía… Aquí podemos y tenemos que observar solo que el circuito recién descrito recibe su necesidad de la naturaleza antropocéntrica del reflejo estético. La vida de los hombres, como un punto de partida y llegada de ese circuito, está bien impuesta por la esencia de la transformación estética.”
La aseveración del arte como reflejo de una prefiguración de la realidad objetiva desatiende el arte moderno y su naturaleza subjetiva en lo abstracto y los movimientos de vanguardia…
Nos habla de la necesidad de mantener lo figurativo como valor estético por ser resultado de la naturaleza antropocéntrica, es decir, el hombre como centro del universo.
Un humanismo que negará a Dios con Nietzsche, y esa naturaleza se refleja en el arte, lo estético, tomando el pretexto necesario para dirigir la actividad estética hacia la necesidad de tomar al hombre como centro de la realidad universal.
Por lo que esto lo sume en una realidad política para su dominación a través del materialismo dialéctico.
El hecho de que es una verdad humana para los hombres, lo centra también en el humanismo, Dewey toma el mismo camino cuando asume a una postura en la que el ciudadano siendo experto y político producto de una educación mantendrá una opinión plenamente informada, asumiendo una responsabilidad por el pensamiento político.
Ambos tomaron el arte en sus tratados, y ambos relacionan la necesidad del arte y la política, asumiendo que la política es un fenómeno en el arte.
Lukács, en su tratado de estética basado en el materialismo dialéctico, nos acerca a través de la fenomenología en el arte, inmersa como fenómeno histórico, social, al arte y política. Su estudio advierte la categorización estética por tener principios científicos. Relacionar las categorías era el punto de equilibrio que necesitaba para poder hacer del arte servidumbre de la política. El arte tiene un alto contenido social en su mensaje, y debía sujetarse al pensamiento marxista leninista y así tomar el control del pensamiento por una necesidad política. Esto se denota cuando titula en su tratado de estética, a la catarsis como categoría general de la estética, resolviendo el problema de rebatir el idealismo kantiano y su propuesta categórica de las artes.
Marchan Fiz en su libro La estética en la cultura moderna nos refiere:
“Dotado de un fino sentido histórico, barrunta, que no se puede obviar la presencia de fenómenos artísticos inéditos, impulsores de transgresiones, que despuntaban en su momento histórico. Ante una tesitura semejante, puede optar por, haciendo oídos sordos a su clamor, subsumirlos en el sistema, o por reconocer el desbordamiento o desmoronamiento del sistema. Esta segunda alternativa propicia un abandono lúcido del mismo y, a lo sumo, una consideración como mero registro, como una descripción ordenada de los hechos, tal como se practicará en la fenomenología estética de nuestro siglo. El pensamiento hegeliano promueve las temáticas de la disolución y él después del arte.”
El desmoronamiento del sistema se da también a raíz de perder el poder de influenciar políticamente sobre el arte. Muchos esfuerzos para sustentar a la filosofía como dominador y sustentador del pensamiento estético, el antes y el después del arte, el fin del arte. Enriquecemos este análisis con Arnold Hauser que define el contenido estético como un simple diccionario y luego relata la incoherencia del arte. Por lo tanto, lo decadente y absurdo en el arte, como él mismo sostiene, se revierte en la decadente y absurda filosofía que predica.
Concluimos que la política siempre ha utilizado la filosofía para la manipulación del artista y el arte, podemos afirmar que históricamente ningún esfuerzo ha perdurado, la única verdad está en que la filosofía y la política nunca podrán detener al artista y su obra en un espacio determinado por el pensamiento filosófico, porque el arte no es producto de la filosofía, el arte es producto del artista, que el pensamiento filosófico recoge de la realidad que él crea, las palabras de Hauser de que la originalidad en el arte no existe, quedan vanas ante la originalidad estética que cambió el mundo, su concepción como lenguaje, introdujo una percepción contemporánea cargada de subjetividad expresiva que se denotan en los cuadros de Kandinsky, Klee y sus seguidores, en nuevos movimientos de vanguardia, dejando a la filosofía el correr detrás del cambio para entender y explicar al arte, lo que sería tomado por las ciencias políticas para poder encontrar puntos de apoyo con los cuales manipular las masas, en un mundo donde la transformación del arte no termina. El antes y el después de la filosofía, así como el fin del arte, quedaron en la retórica. Son una falsedad filosóficamente defendida, y atendida por intereses políticos. La única realidad es que el arte nace en las cavernas y no termina nunca en una cadena de continuidad en la evolución humana y a través de su desarrollo, el único antes y después que existe es él antes y después de querer dominar al artista y su pensamiento desde la filosofía como herramienta de la política. Más el arte hoy es libre, y los artistas son libres de los que aún pretenden atrapar el pensamiento estético en su telaraña política. Es el fenómeno de la política en el arte.
Cuando se colocó la estatua del inca en la plaza de armas del Cusco, se generó una batalla política entre defensores y detractores para que se mantenga o se retire esa imagen de plaza principal. El alcalde y los representantes del ministerio de cultura tomaron posturas diferentes como fue publicado:
“El alcalde provincial, Luis Flores, ratifica determinación, mientras que el antropólogo Rossano Calvo señala que la imagen es ajena a la configuración arquitectónica.” (RPP Noticias, 29 de junio de 2011) http://rpp.pe/peru/actualidad/monumento-de-inca-se-queda-en-la-plaza-de-armas-del-cusco-noticia-380068)
El caso llegó al poder judicial.
“La Dirección Regional de Cultura del Cusco denunció ante la Fiscalía al alcalde Luis Flórez García por colocar una estatua de bronce de un inca en la pileta de la plaza de Armas de la Ciudad Imperial, sin autorización de dicha entidad.
En tanto, el burgomaestre aseguró que tiene potestad para administrar la rotonda en su condición de autoridad edil y que ha presentado un documento en el que sustenta la instalación del monumento, del cual hasta la fecha no tiene respuesta, informó Canal N.”
Diario Perú 21. Miércoles 12 de diciembre de 2012 | 16:28 http://peru21.pe/actualidad/denuncian-penalmente-alcalde-cusco-estatua-plaza-armas-2107631
Las críticas y las opiniones estaban en la mesa de conversación de muchas familias cuzqueñas. Decisiones políticas. Como espectador del problema observaba tal ring de boxeo, cómo se agredían unos a otros, se decía de todo. Que eso no se podía quedar porque la Unesco… Que el Cusco debe tomar sus propias decisiones… Todos opinaban. Un gran conflicto político creado por una obra de arte.
Por decisión política, en Lima se colocó un monumento a Francisco Pizarro que permaneció décadas. ¿Cómo es posible que un delincuente que fue actor y causa de miles de asesinatos, robos, saqueos y violencia en contra de la población, que avaló la masacre del incario en nuestro continente, tenga un monumento? ¿Monumento a qué?
Cuando leemos la entrevista al arquitecto Santiago Augurto refiere:
“Acabé con Pizarro”, expresa con orgullo el arquitecto urbanístico Santiago Augurto, quien tras quince años de lucha silenciosa logró que el monumento de Francisco Pizarro sea retirado de la plazuela ubicada al costado del Palacio de Gobierno. Aunque su idea ha sido cuestionada por un sector de la sociedad, él responde que es momento de recuperar nuestra identidad nacional y de sentirse orgulloso de ser peruano … También se puede fundir y hacer otra estatua, o, en todo caso, conservarlo junto con las cosas que se exhiben del pasado, como las cadenas, los látigos o las espadas. Ver entrevista completa en: http://web.archive.org/web/20101130050240/http://www.peru.com/noticias/idocs/2003/5/2/DetalleDocumento_78433.asp
En Wikipedia encontramos la siguiente referencia.
El alcalde de la ciudad, Luis Gallo Porras, destacó la “figura preclara del héroe y del civilizador”. La Prensa, 8 de enero de 1935, p.3
Si Luis Gallo Porras fue un político del siglo XX y llegó a ser alcalde de la ciudad de Lima, entonces Lima tuvo un hombre de lesa cultura por alcalde. Pensar que Pizarro fue un héroe, es no tener idea del significado de la palabra, los héroes demuestran que lo son por observar una conducta cargada de valores… y civilizador es aquel que eleva el nivel cultural, una conquista sanguinaria y cruel no es de héroes, y la destrucción de una cultura no la eleva. Sin duda, el estado le entregó una medalla a un heredero del criollismo alienado por la vieja cultura europea.
Por eso el arte no puede huir de la política ni de los políticos. Sé que no es político escribir, lo que se detalla en el párrafo que antecede a este; sin embargo, les aclaro que no soy un político, soy profesor de arte. El arte no miente, los políticos sí. Estamos ante un fenómeno del arte que se da en todas las civilizaciones: “el arte y la política”.
Muy buen blog profe
ResponderEliminarEsta muy bonito , me encantó tiene mucha información y específica bien sobre las artes plásticas
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